Washington, 8 jun (Prensa Latina) Las movilizaciones registradas en Estados Unidos y otros países a favor de la justicia racial alcanzan la mayor dimensión vista en décadas, consideran hoy medios norteamericanos de prensa que resaltan el impulso de estas protestas.
Mientras calles y plazas públicas se mantienen llenas de personas dos semanas después de la muerte del afronorteamericano George Floyd a manos de oficiales de la policía, el diario The New York Times sostiene que parece poco probable que el impulso de estas reuniones masivas se agote pronto.
Durante las últimas jornadas las protestas se han tornado cada vez más pacíficas y obtuvieron una serie de victorias simbólicas, como llevar a líderes locales a comprometerse a frenar el poder de la policía.
Este domingo el alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, se mostró a favor de recortar el presupuesto para el Departamento de Policía de la urbe y gastar más en servicios sociales en la ciudad.
Al mismo tiempo, en Minneapolis, donde falleció Floyd el 25 de mayo después de que un oficial blanco se arrodilló sobre su cuello por más de ocho minutos, nueve miembros del Concejo de la ciudad -una mayoría suficiente para evitar un veto- anunciaron su intención de quitarle los fondos al Departamento de Policía y desmantelarlo.
Según la cadena de televisión CNN, como las protestas se mantienen pacíficas, las autoridades suavizan las restricciones impuestas en ciudades como Chicago, Filadelfia, Nueva York y Buffalo, donde se levantaron los toques de queda.
A su vez, el presidente Donald Trump, quien ha sido blanco de numerosas críticas por su respuesta a las manifestaciones y su amenaza de desplegar el Ejército, dijo este domingo en un tuit que le ordenó a la Guardia Nacional comenzar el proceso de retirada de Washington D.C.
El Times recordó que, en años pasados, las redadas y los arrestos rompieron campamentos de protesta contra un oleoducto en Dakota del Norte, cerca de la reserva de Standing Rock, y en el corazón del movimiento Occupy Wall Street.
Pero los manifestantes de ahora dicen que las respuestas agresivas de la policía solo refuerzan su compromiso de regresar a las calles, apuntó el periódico.
Después de que las fuerzas del orden la semana pasada usaron granadas de destello y un aerosol químico para dispersar a los manifestantes pacíficos del Parque Lafayette, frente a la Casa Blanca, más personas comenzaron a aparecer, señaló el medio.
Como las protestas actuales no son solo por la muerte de Floyd, sino contra todo el sistema de desigualdad racial, un criterio extendido es que no podrán apagarse solo con presentar cargos contra los agentes involucrados en su deceso.
Activistas y académicos que han estudiado la cresta y la caída de otros disturbios por asesinatos policiales, tiroteos en escuelas o derechos de las mujeres estiman que la indignación generalizada por las injusticias económicas y raciales puede dar al nuevo movimiento una mayor durabilidad, apuntó el Times.